Viendo la llegada de Felipe Benjumea (Presidente Ejecutivo de Abengoa) era difícil no evocar las imágenes de toreros rodeados de sus incondicionales en las jornadas en las que se barrunta triunfo. Toreaba en su plaza (en Sevilla es venerado), y a la cita acudió lo más granado de la clase política y empresarial local  (Alcalde y Presidentes de las asociaciones de empresarios a la cabeza). Todo a favor (venía a hablarnos de renovables en la semana en la que el pánico nuclear, desatado por los desgraciados acontecimientos de Japón, había zanjado con brusquedad el resurgir del debate sobre el modelo energético español). Al día siguiente le esperaba un público mucho menos receptivo (era uno de los cuarenta y un  directivos invitados a Moncloa). Si hubiéramos estado en época de chisteras y levitas, además de abrirle el pasillo, nos hubiéramos descubierto a su paso. Runrún de expectación según se aproxima (al atril) y se  prepara. Luego silencio reverencial…

25 de Marzo de 2011. Resumen de la conferencia “Desarrollo sostenible. Necesidad, reto y oportunidad”. Ponente: Felipe Benjumea Llorente (Presidente Ejecutivo de Abengoa). Organizador: Confederación Española de Directivos y Ejecutivos (CEDE). Sevilla, Hotel Meliá Lebreros. Asistentes 180 personas. Lleno.

Crisis

Podemos aceptar que la crisis, en la que nos hayamos inmersos desde 2007, tuvo un origen financiero y ha desembocado en una crisis económica. También es cierto que, no  siendo una crisis española, tampoco se puede considerar una crisis mundial. Ha afectado, fundamentalmente, a los países desarrollados y algunos ya están saliendo. Dos son las bases en las que fundamentan su recuperación los que lo están consiguiendo: un tejido industrial fuerte y consolidado, y una industria tecnológicamente avanzada

En el período 1995-2007 España creció con tasas medias superiores a las de otros países de nuestro entorno. Sin embargo vivimos, durante esa época,  por encima de nuestras posibilidades. En ese mismo período nuestra productividad descendió un 20% por debajo de la media de los países industrializados, y el crecimiento de la productividad por factores se situó seis veces por debajo de la de esos países.

Hemos vivido en la vorágine del boom inmobiliario y el crecimiento desaforado de la construcción. El posterior estallido de la burbuja nos está llevando a sufrir una contracción económica de la que se están derivando altísimas tasas de desempleo. No podemos continuar mirándonos y lamentándonos.

La receta para la salida de la crisis: Plan de Acción y nueva Actitud Colectiva

En una economía global el mercado es el mundo. Y para competir con garantías debemos recuperar la austeridad como una de nuestras virtudes.

Necesitamos un Plan de Acción y una nueva Actitud Colectiva.

Un Plan en el que se apunte y focalice el esfuerzo, público y privado, en sectores concretos de actividad. Sectores en los que desarrollar nuestra capacidad aportando valor y en los que fundamentar la consolidación de nuestro tejido productivo.

Una nueva Actitud Colectiva basada en la honestidad personal, en una sociedad con amplitud de miras, en empresas con capacidad y voluntad para asumir riesgos y en una apuesta por la diferenciación y la innovación.

Propuestas de Mejora

La Universidad y los organismos públicos de investigación han de responder a los problemas reales de los que los sufragan con el pago de sus impuestos. Es imprescindible un pacto entre las empresas y la Universidad que prime el conocimiento tecnológico útil. La curiosidad investigadora para la que no existen los plazos dista de ser la investigación productiva que necesitamos.

Nuestro pasado, nuestra historia, forma parte de nuestra identidad. No se trata de olvidar lo que somos ni de dar la espalda a lo ocurrido renunciando a las lecciones que podamos extraer. Pero de ninguna manera podemos permitir que nuestras tradiciones sean algo más que lo que nos arraiga para convertirse en lo que nos bloquea.

 Cambio climático. Alternativas al modelo energético tradicional.

La energía necesaria para nuestro desarrollo se ha obtenido fundamentalmente de los combustibles fósiles. Es incuestionable que el crecimiento de las emisiones de gases de efecto invernadero es la causa del progresivo calentamiento que está viviendo nuestro planeta como manifestación palmaria del Cambio Climático y que, de no corregirse, tendrá efectos evidentes en nuestras condiciones de vida e impactos muy negativos en la economía mundial (Informe Stern).

La solución pasa por un modelo energético basado en energías limpias. En una sola hora la superficie de la tierra recibe del sol el equivalente a la energía que consumimos en todo un año. Es por ello que se debe proceder a la sustitución progresiva de la energía obtenida de los combustibles tradicionales por la obtenida de fuentes renovables.

La rentabilidad económica de las renovables se alcanzará en los próximos años. El camino es la  investigación y el subsiguiente incremento de la eficiencia de las plantas productoras. Mientras llega ese momento, es preciso seguir primando dichas instalaciones e implementar los mecanismos que hagan que el consumo de combustibles tradicionales soporte el coste real del tratamiento de las emisiones que generan.

Biocombustibles

El transporte es un gran consumidor de energía en su mayor parte obtenida de combustibles fósiles. Su sustitución por bioetanol constituye la única alternativa  que, además de reducir el impacto ambiental,  resulta viable en el plazo de los próximos 20 ó 30 años.

La tesis que hace responsable a los biocombustibles del alza en el precio de las materias primas y sus consecuencias sobre las sociedades en vías de desarrollo, elude contemplar otros factores como la incidencia de las alteraciones en el clima sobre las cosechas, los conflictos bélicos en algunos de los países productores o  la cuota de responsabilidad asignable a la especulación. Apuntar a la supuesta rotación protagonizada  por los cultivos energéticos en detrimento de los cultivos alimentarios entra en contradicción con los datos. El área dedicada a la producción de este tipo de  plantas, en países cuyo consumo está extendido, supone el 5% de la superficie cultivada en Estados Unidos y apenas alcanza el 2% de la superficie cultivada en el caso de Brasil. Existen en el mundo 700.000.000 de hectáreas sin cultivar cuya puesta en producción equivaldría al total de la energía obtenida del consumo de petróleo, con los beneficios adicionales que se inducirían en las economías locales.

En cualquier caso la solución pasa por establecer la trazabilidad de los procesos desde el origen y articular mecanismos de control que garanticen una producción responsable. Mirando al futuro ya estamos trabajando en una segunda generación de biocombustibles, que no competirá con los alimentos, basada en  el aprovechamiento de los compuestos nitrocelulósicos presentes en los residuos agrícolas y que además reducen las emisiones respecto a los combustibles a los que sustituyen.

Plantas termosolares

La tecnología termosolar presenta una muy positiva evolución en sus resultados. Su potencial de desarrollo por la vía de la innovación es importante. Aumentar la temperatura en las torres receptoras sobre las que concentramos la energía reflejada, los nuevos fluidos caloportantes y la capacidad de almacenamiento térmico con sales fundidas son algunas de las líneas abiertas. Estimamos que en un plazo aproximado de  quince años, la producción de energía con está tecnología será más barata que su obtención del petróleo. Este plazo sería menor si se redujesen las subvenciones y bonificaciones de las que, de facto,  disfruta la industria petrolera.

Es evidente que en España contamos con las condiciones naturales idóneas para su implantación y desarrollo. En adición nos permitiría una mejora sustancial de nuestra balanza de pagos, la reducción de nuestra dependencia energética del exterior (que debería ser uno de nuestros objetivos estratégicos prioritarios como país) y una importantísima fuente de creación de empleo.

Contamos con plantas termosolares funcionando a escala comercial (entre ellas Sanlúcar la Mayor, Sevilla). Su operatividad actual ya las sitúa por encima de los niveles de eficiencia con las que fueron proyectadas. En Estados Unidos hemos comenzado la planta Solana en Arizona. Supondrá una inversión de 2.000 millones de dólares y sus 250 MW  cubrirán la demanda de más de 70.000 viviendas. El propio Presidente Obama se refirió a nosotros con las siguientes palabras: “es una buena noticia que hayamos sido capaces de atraer a una empresa para construir una planta y crear puestos de trabajo aquí en América”.

Estamos seguros de las ventajas de las energías renovables y debemos seguir por ese camino, invirtiendo e investigando. Nos lo agradecerán las generaciones futuras.

Otras cuestiones. La energía nuclear

Las energías renovables no serán las únicas energías en el futuro, si bien, deberán tener un peso mayor en la producción de energía. La energía nuclear tiene, hoy por hoy, dos problemas sin resolver: el almacenamiento de los residuos, con una actividad remanente estimada en miles de años y la seguridad en la producción.

Sin duda habrá un antes y un después de los desgraciados acontecimientos ocurridos en Japón. Supondrá un cambio en la manera en la que se afrontan ciertas inversiones. Queda mucho por desarrollar en este campo y probablemente el futuro del proyecto nuclear pase por las investigaciones en curso sobre la fusión. Nuestra actividad tradicional de ingeniería en Abengoa tiene una componente importante en el campo de la investigación para la producción de energía, pero no contemplamos la energía nuclear como línea de trabajo.

Hidrógeno

Competirá en el futuro con la electricidad como vector energético (medio de transmisión de energía desde la fuente primaria hasta los usuarios). Hay dos maneras de emplearlo: en procesos térmicos convencionales mediante motores de combustión que no producen emisiones, y las pilas de hidrógeno de las que se podrá obtener electricidad mediante procesos electroquímicos. En la actualidad todos los vehículos del complejo termosolar ubicado en Sanlúcar la Mayor utilizan hidrógeno.

Seguridad jurídica  y empresa

Es necesario plantear un nuevo paradigma económico en el que la producción de bienes y servicios contemple en sus precios, además del coste de los factores de producción, el coste medioambiental. Si se añade la eliminación de situaciones subvencionadas por diversas vías (incentivos, bonificaciones fiscales,…) a las energías fósiles nos encontraremos con que la diferencia es mínima y la rentabilidad de las renovables es real. Las inversiones en producción de energía tienen un largo período de maduración. La estabilidad política es imprescindible. Hay grandes superficies de desierto improductivas. Sin embargo los regímenes de gobierno de ciertos países no ofrecen la confianza suficiente. En nuestro país la consistencia del marco regulador es deseable para que las empresas abordemos nuevos proyectos. La inseguridad jurídica que se deriva de los vaivenes en este sentido penaliza y compromete la inversión a futuro.

Mensajes de esperanza

 Debemos tener confianza en nuestro futuro, en nuestra capacidad para desarrollar una industria avanzada y competitiva. La diferencia que explica que las tasas de desempleo se sitúen en el País Vasco en el 8% y en nuestra Andalucía en el 30%, estriba en la capacidad exportadora de su tejido productivo. No podemos instalarnos en el pesimismo. El camino está en la formación, en el riesgo, en el esfuerzo y en el espíritu de sacrificio.

Nuestra Universidad debe mejorar y adaptarse a las necesidades de la sociedad. Los centros universitarios deben competir entre ellos para la atracción del talento y la formación de las generaciones futuras. En esa línea se enmarca nuestra colaboración con el proyecto de implantación de la Universidad Loyola de Andalucía (de cuya Fundación es patrono Felipe Benjumea).

En absoluto es preocupante el fenómeno que se ha venido a denominar como “fuga de cerebros”. Es saludable y hasta deseable que nuestra gente salga, adquiera experiencia y se desarrolle profesionalmente en otros países. Cuando se den las condiciones adecuadas se producirá su vuelta y  ese proceso nos enriquece y fortalece como sociedad.

Debemos, por ello animar a los que salgan, a los emprendedores, en resumen a los que se quieran arriesgar. El mundo esta ahí, abierto a todos.

Ideas claras. El secreto del éxito de Abengoa

El negocio de Abengoa está estructurado en torno a la energía y el medio ambiente. Todo producto que encaje en ese marco puede formar parte de nuestras líneas de trabajo. Ahora bien, debe cumplir dos premisas fundamentales para que lo abordemos (y de no cumplirlas sencillamente no nos interesa): que haya tecnología y que podamos ser líderes globales.

Sobre el ponente

Felipe Benjumea (Sevilla, 1957) es Licenciado en Derecho por la Universidad de Deusto. Presidente Ejecutivo de Abengoa ha formado parte de los Consejos de Administración de Sociedad General de Cablevisión, La Papelera Española, Thyssen Industries, Hispano Inmobiliaria de Gestión, Banco Santander Central Hispano,  Iberia y de la Compañía Operadora del Mercado Español de la Electricidad (OMEL).

En la actualidad preside la Fundación Focus-Abengoa y el Consejo de Cooperación Universidad – Sociedad de la Universidad Loyola Andalucía. Es Consejero de Garanair y miembro del Consejo Asesor de Ciencia y Tecnología del Ministerio de Educación y Ciencia. Patrono de la Fundación Consejo España – Estados Unidos, de la Universidad Pontificia de Salamanca, Fundación CEDE (Confederación Española de Directivos y Ejecutivos), Fundación Escuelas Profesionales de la Sagrada Familia y Fundación Universidad Loyola Andalucía.

Sobre Abengoa

Articula su negocio en tres líneas de actividad: ingeniería y construcción (energía, agua y tecnologías de la información), infraestructuras de tipo concesional (operación de plantas solares, de cogeneración y de desalación, así como de líneas de transmisión mediante contratos de venta a largo plazo, tipo compra garantizada take or pay o suministro-venta de energía power purchase agreement), y producción industrial (como biocombustibles, reciclaje de polvos de acería y de escorias salinas).

Con presencia en los cinco continentes, en el ejercicio 2010 ha facturado 5.566 millones de euros (34,2% incremento sobre el ejercicio anterior) de los que aproximadamente el 75% se han obtenido fuera de España. En Abengoa trabajan más de 26.000 personas.

Sobre el acto

En la periferia (entendida como todas aquellas ciudades que no son Madrid o Barcelona) hace bastante “frío” y andamos huérfanos de actos de cierto fuste a nivel empresarial. Por ello es reseñable la iniciativa de CEDE de convertir en itinerantes sus “Desayunos de Trabajo” y desde Know Square agradecemos su invitación reconociendo el acierto de su  primer acto en esta ciudad.

Acierto por lo destacado del ponente, Felipe Benjumea lidera la primera empresa (privada) andaluza, multinacional líder en su sector; y por lo oportuno del tema, en un entorno de reactivación del debate sobre el modelo de producción de energía en España con los sucesos de Japón como telón de fondo.

Las ciudades “pequeñas”  se vuelcan con sus hijos predilectos y esta ocasión fue muestra de ello con una numerosa asistencia y presencia destacada de la clase política local (nutrida representación de los ediles del Ayuntamiento encabezados por el Alcalde y el candidato de la oposición), y de la clase empresarial (Santiago Herrero, Vicepresidente de la CEOE y Presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía; Antonio Galadí, Presidente de la Confederación de Empresarios de Sevilla; Francisco Herrero, Presidente de la Cámara de Comercio de Sevilla , entre otros).

Estructurado en dos partes muy distintas. La primera adoptó la forma de conferencia tradicional, sin otro apoyo que los documentos que el ponente leyó de pie, tras el atril. Articuló su discurso en una amplia  introducción sobre cuestiones generales que dio paso al desarrollo del contenido anunciado en el título de la convocatoria.

En la segunda parte a modo de coloquio, el moderador filtró las preguntas recibidas por diversos canales: aquellas remitidas a CEDE antes del acto por correo electrónico (fórmula que elegimos en Know Square que contamos con la fortuna de que en su mayor parte fueran trasladadas al ponente),  las realizadas por escrito, vía moderador,  por los asistentes y las de los que seguían el acto on line. El ponente, sentado en la mesa presidencial en esta segunda parte, mantuvo la misma línea inicial, contenida en el tono, medida en las formas y rotunda en sus afirmaciones.

Felipe Benjumea estuvo a la altura de la expectación creada y tuvo mensajes para todos. Para su ciudad, una Sevilla con cierta tendencia al ensimismamiento: “…de ninguna manera podemos permitir que nuestras tradiciones sean algo más que lo que nos arraiga para convertirse en lo que nos bloquea”. Para su Andalucía, hastiada de EREmitas y otras malas hierbas similares: “…para competir con garantías debemos recuperar la austeridad como una de nuestras virtudes” o “no podemos instalarnos en el pesimismo. El camino está en la formación, en el riesgo, en el esfuerzo y en el espíritu de sacrificio”. Incluso un anticipo de lo que al día siguiente pidió en Moncloa: “…la consistencia del marco regulador es deseable para que las empresas abordemos nuevos proyectos. La inseguridad jurídica que se deriva de los vaivenes en este sentido penaliza y compromete la inversión a futuro.”

Algunas personas alcanzan la categoría de mito en sus ciudades natales. De las leyendas que circulan en torno a Felipe Benjumea muchas hacen referencia a su enorme capacidad de trabajo y alto nivel de exigencia. En ese contexto hay que entender la última pregunta formulada por el moderador del acto: “¿Tiene alguna otra afición además de Abengoa?”, a la que el ponente respondió, no sin un cierto rubor, en sentido negativo (acompañada del rumor de satisfacción y reconocimiento de todos aquellos asistentes que veían confirmadas sus sospechas en directo), para acabar añadiendo que el poco tiempo que le quedaba se lo dedicaba a su familia, apostillando finalmente su respuesta (hay que tener valor en una ciudad tan polarizada) confesándose bético.

Fue el único lance que levantó del respetable una sonora división de opiniones.

Publicado en Know Square Abril 2011

Entradas recomendadas